Piel sensible versus piel resistente
Actualmente se habla cada vez más de la piel sensible, pero ¿sabemos qué caracteriza este tipo de piel? ¿Son todas las pieles sensibles iguales?
En los últimos artículos hemos comentado diferentes tipos de piel: grasa vs seca, pigmentada vs no pigmentada y arrugada vs tersa. En este veremos las diferencias entre piel sensible y resistente y sus diferentes variedades.
La piel resistente
Comenzaremos por la piel resistente que es el tipo de piel antagónico a la piel sensible. La piel resistente se caracteriza por un stratum corneum -capa más superficial de la piel- robusto que la protege eficazmente contra alérgenos y otros irritantes exógenos del medio ambiente. Los alérgenos son sustancias que pueden inducir una reacción de hipersensibilidad en personas susceptibles que han estado previamente en contacto con ellos.
Es extraño que se produzca eritema -enrojecimiento de la piel debido al aumento de la sangre contenida en los capilares- o acné en personas con piel resistente. Un eritema puede producirse por una exposición solar, acné, stress o variaciones hormonales.
Las personas que tienen piel resistente no tienen problemas al utilizar productos para el cuidado de la piel, no tienen efectos adversos. Aunque esto no siempre es beneficioso, puesto que muchos productos se vuelven ineficaces debido a la alta impermeabilidad de ese tipo de pieles. Por lo tanto, personas con alta resistencia en la piel no detectan diferencias entre diferentes productos para el cuidado de la piel porque muchos de ellos son demasiado débiles para penetrar ese potente stratum corneum.
La piel sensible
La piel sensible es un fenómeno mucho más complicado de caracterizar. Y, por desgracia, es cada vez más frecuente.
Muchos pacientes que acuden al dermatólogo quejándose de pieles sensibles son mujeres jóvenes en edad fértil. Afortunadamente, la incidencia de pieles sensibles disminuye con la edad.
Como la frecuencia de casos con pieles sensibles ha ido aumentando, así lo han hecho los productos para este tipo de piel.
Variedades de pieles sensibles
Existen 4 variedades de piel sensible.
- Acné, propensa a tener acné, puntos negros o puntos blancos.
- Rosácea, con una marcada tendencia al enrojecimiento recurrente y a ruborizarse.
- Escozor, proclive a experimentar escozor o sensación de calor.
- Alérgica, propensa a manifestar eritema, prurito y descamación.
Cada uno de estos subtipos requiere un tratamiento distinto. Pero a pesar de las diferencias, todos ellos comparten algo común: la inflamación. Por lo tanto, el tratamiento siempre requerirá disminuir o eliminar dicha inflamación. Para pacientes que muestran más de un subtipo de piel sensible, el tratamiento es más complejo.
Piel sensible con acné
A pesar de la variación en la incidencia y en la frecuencia, el acné es la afección cutánea más común. Afecta típicamente a adolescentes y adultos jóvenes, por igualdad de género, y en edades comprendidas entre los 11 y los 25 años.
El segundo grupo demográfico que sufre acné son las mujeres adultas con disfunciones hormonales.
El origen del acné depende de 4 factores: producción excesiva de sebo, poros obstruidos por queratinocitos muertos dentro de los folículos pilosos fuertemente adheridos por el acné, presencia de bacteria Propionibacterium acnes e inflamación.
Propionibacterium acnes
Los queratinocitos son las células predominantes (80%-90%) de la epidermis, la capa más superficial de la piel. Contienen una proteína muy dura que se llama queratina, que estimula el crecimiento de células epiteliales en la piel.
Desarrollo del acné
De todos los factores, la característica primordial es la adherencia de los queratinocitos en los folículos pilosos. Esto da como resultado una producción excesiva de sebo, que genera la obstrucción de los folículos dando lugar a una pústula. Como consecuencia Propionibacterium acnes migra dentro del folículo, juntándose con el sebo y los queratinocitos muertos.
Esta interacción provoca la liberación de citoquinas y otros factores inflamatorios que generan la inflamación, característica con rojez y pus. Las citoquinas son un grupo de proteínas que actúan mediando interacciones complejas entre las células inflamatorias.
Citoquinas, actúan mediando interacciones complejas entre las células inflamatorias
El tratamiento del acné tiene su origen en los 4 factores que lo generan. Reducir la producción excesiva de sebo -con retinoides-, desobstruir los poros -retinoides, alfa-hidroxiácidos o AHAs-, erradicar las bacterias -antibióticos- y reducir la inflamación.
Piel sensible con rosácea
Es una patología semejante al acné, pero cuyo origen no ha sido completamente elucidado. Muestra rojez facial y pápulas como el acné. Pero también se caracteriza por las arañas vasculares, dilataciones de capilares pequeños, y de los vasos superficiales, lesiones de color rojo brillante de 1-4 mm de diámetro que palidecen a la presión.
El tratamiento consiste en el uso de antiinflamatorios que disminuyan la dilatación de los capilares sanguíneos y en evitar la exposición a factores que desencadenen o agraven los síntomas.
Planta de árnica
Los antiinflamatorios más efectivos provienen de la botánica. Son, entre otros, Aloe vera, árnica, camomila o extracto de pepino.
Piel sensible con escozor
El escozor es una respuesta neuronal no alérgica que algunas personas experimentan como reacción a algunos desencadenantes.
Existen algunos tests para evaluar el escozor, como el del ácido láctico. Es un test muy reconocido para personas que muestran irritación cutánea invisible y subjetivo.
La sensación de escozor no tiene por qué estar ligada a un eritema porque muchos pacientes sienten escozor sin que se manifiesten signos de rojez.
Ácido cinámico
Las personas que sufran de este tipo de piel sensible deben evitar productos que contengan alfa-hidroxiácidos -AHA-, ácido benzoico, bronopol, ácido cinámico, formaldehido, propilenglicol, compuestos de amonio cuaternario, lauril sulfato sódico -SLS-, ácido sórbico, urea o vitamina C.
Piel sensible alérgica
Numerosos estudios han demostrado que por lo menos un 10% de pacientes sometidos a patch test de 20 a 100 ingredientes, manifiestan sensibilidad alérgica por lo menos a uno de ellos. El patch test o prueba de parche es un método utilizado para determinar si una sustancia específica causa inflamación alérgica de la piel de un paciente.
Las fragancias pueden contener alérgenos
Los compuestos más alérgenos son las fragancias y los conservantes.
Bibliografía