¿Los productos de belleza afectan a la fisiología de nuestra piel?
¡La respuesta es sí! Los productos de belleza cosméticos que nos aplicamos sobre nuestra piel cambian la arquitectura del stratum corneum -capa exterior de la piel- y modifican el equilibrio de su función barrera.
Es decir, los ingredientes aplicados de forma tópica sobre la piel no son tan inertes como podríamos imaginar. Es más, la composición de los productos de belleza –moisturizers– determina si los tratamientos refuerzan o debilitan la función barrera de la piel.
La piel como función barrera
Recordemos que la principal función de la piel es actuar como barrera protectora entre nuestro organismo y el exterior. La piel minimiza la pérdida de agua del cuerpo y al mismo tiempo previene la entrada de gérmenes patógenos y alérgenos.
La piel como función barrera
Una barrera defectuosa es el origen de muchos procesos inflamatorios que conducen a enfermedades de la piel, especialmente en pieles secas.
Los productos cosméticos contienen sustancias que se consideran activas –humectantes, ceramidas, ácidos grasos, vitaminas, extractos de plantas– y sustancias que se consideran como excipientes –emulsificantes, antioxidantes, conservantes-.
Vitaminas para la piel
Encontrar el producto de belleza idóneo para cada persona muchas veces es una cuestión de prueba-error. Por ello, es necesario conocer los mecanismos que tienen los diferentes ingredientes sobre nuestra piel. Tanto los activos como los excipientes pueden tener influencias inesperadas en su estructura y función.
Mecanismos de absorción de los productos de belleza
Al aplicarse un producto de belleza sobre la piel pueden producirse diferentes procesos. Los ingredientes pueden simplemente permanecer sobre la superficie, pueden ser absorbidos o metabolizados o pueden desaparecer por evaporación, desprendimiento o por contacto con otros materiales.
El vehículo de aplicación puede influir también en la distribución del producto sobre el área tratada. Sólo un 50% de la crema aplicada permanece en la superficie después de 8 horas. Las cremas y los ungüentos permiten mayor transferencia de activos que las lociones.
Factores que intervienen en la absorción de activos
La eficacia de los ingredientes activos está relacionada con su difusión a través de la barrera de la piel y con su concentración en la formulación. Moléculas pequeñas tienen mucha más facilidad para atravesar el stratum corneum que moléculas grandes como partículas o polímeros.
La ionización, es decir, transformar la molécula en una parte positiva y otra negativa, también reduce la absorción y la eficacia. Por ejemplo, al aumentar el pH, disminuye la absorción de ácido láctico porque está más ionizado.
El pH de la piel y de los cosméticos
La penetración también depende de la estructura de la emulsión. La encapsulación de una sustancia irritante -como el ácido láctico- en una fase acuosa interna reduce las propiedades irritantes de la formulación.
La absorción está muy influenciada también por el grado de dermatitis de la piel y aumenta en pieles secas y descamadas. La función barrera disminuye en pieles con grietas originadas por la disminución de elasticidad de las pieles secas. Este tipo de pieles son más permeables porque las células externas –corneocitos– son más pequeñas, creándose caminos intercelulares más asequibles.
Efectos de las grasas y aceites sobre la piel
La aplicación de lípidos -básicamente grasas o aceites– sobre la piel, proporciona una membrana oclusiva que reduce la pérdida de agua a través de la piel.
Los lípidos son un conjunto de biomoléculas insolubles en agua. Cumplen funciones diversas como de reserva energética –aceites y grasas-, estructural -células- y reguladora – hormonas-.
La pérdida de agua transepidérmica -TEWL– es un concepto esencial cuando se piensa en la sequedad de la piel. Es la cantidad de agua que pasa del interior del cuerpo a la atmósfera a través de procesos de difusión y/o evaporación. Esta pérdida de agua constante -unos 100 a 150 mililitros por día y metro cuadrado– es una de las principales razones por las que humidificar la piel con regularidad es tan importante.
Efecto oclusivo de algunos ingredientes cosméticos
El grado de disminución de esta pérdida de agua transepidérmica depende de la cantidad y del tipo de producto aplicado. Por ejemplo, al aplicar una capa gruesa de parafina -aceite mineral sintético- sobre una piel normal, se puede llegar a reducir hasta un 50% la pérdida de agua. La manteca de karité y algunas ceras también consiguen efectos similares.
Efecto de la parafina sobre la piel
Es importante resaltar que la disminución de esta pérdida de agua es más importante en pieles maduras que en pieles jóvenes y sanas cuya función barrera ya es excelente.
Los lípidos aplicados sobre la piel también pueden ser absorbidos, produciendo un efecto emoliente y dando lugar a una menor descamación de la piel.
Hidratación y sequedad
El agua contenida en los productos cosméticos hidrata inmediatamente el stratum corneum por absorción a través de las capas de la piel. No obstante, esto es un efecto a corto plazo porque el exceso de agua se evapora rápidamente si no se retiene en la piel por ingredientes activos: los humectantes.
Importancia del agua para la piel
Acción de los humectantes
Los encargados de retener el agua en la piel son los humectantes. Son compuestos capaces de absorber varias veces su peso en agua. La glicerina, ácido hialurónico, PCA –Pyrrolidone Carboxylic Acid-, urea, miel son muy buenos humectantes naturales que se utilizan en formulaciones cosméticas.
El agua de la piel es muy importante para mantener su flexibilidad, pero los humectantes pueden afectar sus propiedades físicas. La piel contiene el factor natural hidratante -NMF-. Es una mezcla de sustancias solubles en agua y humectantes muy activos, capaces de capturar el agua de la atmósfera como auténticos imanes.
La miel es un buen humectante
Se ha comprobado que el NMF y los alfa-hidroxiácidos -como el ácido láctico– aumentan la elasticidad de la piel. Si se elimina el NMF, el agua por sí sola no puede restaurar su elasticidad.
Los ácidos cosméticos –AHA-
Una exposición prolongada a un exceso de agua provoca una hinchazón de los corneocitos -células de la capa externa de la piel-. Lo mismo sucede después de someter a la piel durante 24 horas a un tratamiento de una gruesa capa de parafina.
Un humectante que también provoca una hinchazón de las células superficiales de la piel es la glicerina. También previene la cristalización de los lípidos de la piel en condiciones de humedad relativa baja.
Se ha comprobado que, en pieles secas, la proporción de lípidos en estado sólido es mayor. Los humectantes de los productos cosméticos ayudan a mantener los lípidos en estado líquido.
La urea es un humectante excelente. Tiene también la propiedad de mantener los lípidos en estado líquido a bajas temperaturas.
Importancia de conocer los mecanismos de interacción entre los productos cosméticos y la piel
Comprender las interacciones que se generan entre los productos de belleza de forma tópica sobre la piel y la epidermis permite crear cremas productos de belleza a medida, tanto para pieles sanas como para pieles con problemas de dermatitis.
Cosmética personalizada
Existen métodos no invasivos para determinar si las cremas cosméticas refuerzan o debilitan la función barrera de la piel. Uno de ellos es la medida de la pérdida de agua transepidérmica -TEWL-, muy utilizado actualmente en la industria cosmética.
Bibliografía
Effect of moisturizers on epidermal barrier function, Marie Lodén, Clinics in dermatology, May 2012. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/22507043